El Sr XXX vive en un pequeño pueblo andaluz. Regenta una panadería, la única que existe en el municipio. Además desde hace un año y medio y casi a petición popular es el alcalde de sus vecinos puesto que el anterior tuvo que renunciar al cargo.
Durante este tiempo ha hecho muchas cosas importantes por el pueblo y ahora que se acercan las elecciones municipales todos lo animan a presentarse.
El problema es que lleva un año y medio casi sin dormir. Se levanta a las dos de la mañana para comenzar a hacer el pan y a las ocho lo tiene todo listo para que su mujer lo venda. A esa misma hora acude al ayuntamiento para representar al pueblo que tanto lo quiere.
Por la tarde vuelve a la panadería y si todo va bien, sustituye a su mujer, que debe encargarse del hijo que tienen en común. A las nueve de la noche regresa a casa pero no puede acostarse muy pronto puesto que a las dos de la mañana su despertador vuelve a sonar.
Próximamente se convocarán elecciones municipales, para las que todos quieren que se presente, pero él no aguanta más este ritmo de vida y hace mucho tiempo que se está planteando dejar una de sus funciones. Su mujer le reclama más tiempo y su hijo a este paso no lo va a reconocer. La solución es facil, tan solo debe dejar una de sus actividades....pero cuál?
Si abandona el ayuntamiento, sus vecinos ya le han adevertido de los males que sufrirá el pueblo sin él, hasta ahora todo el mundo está muy satisfecho de sus logros. Él sospecha que nadie más está dispuesto a cargar con sus responsabilidades y por eso lo animan a que repita en su cargo, jugando incluso con una especie de chantaje moral.
Por el contrario, si cierra su panadería, el pueblo se quedará sin pan y deberán traerlo desde otros pueblos, pero no parece que hayan muchos candidatos a encargarse de sus clientes y mucho menos nadie que quiera adquirir el negocio.
Podría contratar a alguien para trabajar en su local y que cubriera las horas que invierte en él, pero hasta ahora no ha encontrado a nadie de confianza dispuesto a sacrificar sus noches por un modesto sueldo.

Este es un caso real que escuché en una emisora de radio hace un par de semanas.