V, los visitantes

Cada sábado entre las 19:30 y las 20H aproximadamente millones de españoles nos reuníamos frente al televisor para ver a Diana comerse un lagarto a lo vivo, sin masticar ni una sola vez, desencajando su mandíbula como solo una boa podría hacerlo. Tuvieron que recrear una cabeza mecánica a imagen y semejanza de la actriz para poder rodar esas escenas.
Qué horror y qué fascinación sentíamos por esa mujer! Gracias a series como esta o como Dinastía o Falcon Crest, descubrí que "las malas" me gustaban mucho más y que no sólo van a todas partes como dicen, sino que además, cobran más que "las buenas". Seguramente en España, a la actriz que da vida al personaje le habrían negado el tinte en su peluquería del barrio por ser tan mala y comerse a tanta gente, pero esas son las cosas que pasaban en España cuando solo teníamos tres canales.

V, en un principio iba a ser una serie que tratara el tema de la invasión nazi en Francia y de la resistencia, los productores no lo tenían muy claro, así que cuando uno de sus creadores propuso cambiar a los nazis por extraterrestres lagartos, aceptaron encantados. En los primeros capítulos un mensaje final uno homenajeaba a los miembros de la resistencia, fue lo úncio que quedó de aquel primer proyecto. Una película o una serie con marcianos de por medio tiene un porcentaje de éxito asegurado, excepto esa serie española que emitieron en Antenta3 con Jorge Sanz y otros actores pésimos.
La serie fue creada como un telefilm, de dos y cuatro capítulos de larga duración, en España se decidió dividirla para sacarle más provecho en todos los niveles. En uno de sus capítulos se habla de un tal Sr Palacios, jefe de la resistencia en Córdoba (España), curioso, verdad?.
No olvidemos, que los lagartos con apariencia humana, llegaron al planeta tierra con la intención de ayudarnos y llevarse algunos minerales necesarios. En pocos capítulos descubrimos que sus intenciones eran convertir su planeta en su despensa nacional.
Para completar la historia, nada mejor que un amor imposible entre un lagarto bueno (Robert Englund) y una niñata rubia embarazada de otro marciano. El amor si es imposible se vive mejor en la pantalla y entre tanto tiro de pistolas láser nos daba algunos momentos de romanticismo.
En algún momento se dijo que la serie terminaría como un sueño, es decir, que uno de los protagonistas sería el que lo hubiera soñado, todo involucrando a la gente de su entorno, pero eso creo recordar que ya lo hicieron en Dallas cuando eliminaron a Bobby de la serie y en la siguiente temporada descubrimos que había sido un sueño de Pam, que al levantarse se lo encuentra en la ducha tan fresco.
En resumen, que si alguna vez acudís a un casting, optad por los papeles de malas, es posible que os nieguen el pan en vuestro barrio, pero cobrareis millonadas.

Besitos lagartos.