Enlazándome

Necesito unas vacaciones para descansar de las de Semana Santa, que como muchos sabeis, aproveché para mudar mis trastos a un nuevo hogar. Este Martes me está costando ponerme al día incluso con las cosas más sencillas del trabajo. Jamás hice caso de ese refrán que dice: "No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy", así que por mucho que me interesara consultar horarios de trenes que he de coger para llegar hasta aquí, esta mañana he llegado más de media hora tarde al trabajo. Culpa de las huelgas, he dicho, que no respetan a los trabajadores puntuales (ese tipo de comentarios entusiasman a mi jefe y me evitan malas rollos por su parte).
Todavía tengo el síndrome de la vuelta al cole y echo de menos aquellos primeros días en los que para incorporarte a la rutina diaria comenzaban por mandarte redacciones sobre tus vacaciones y cosas similares.
El caso es que son más de las siete y sigo con el mismo ánimo y la misma voluntad que esta mañana a las nueve, así que he dedicado gran parte del tiempo a "enlazarme". Tengo una distracción que hace que mis horas muertas pasen más veloces, no creo que haya inventado nada nuevo pero os voy a contar en qué consiste
Se trata de entrar en un blog cualquiera, cuanto más anónimo mejor, por eso siempre termino eligiendo uno de los que aparecen en la web como recomendados o algo así. A través de este primero, me voy metiendo en cualquiera de los links que publica, leyendo todos los artículos del día y observando las fotos que publican todos estos personajes anóminos.
Hace tiempo se decía que una ardilla podía cruzar toda España de punta a punta a través de sus árboles, sin necesidad de tocar el suelo. Bien, pues yo soy una especie de ardilla virtual.
Hoy además, tomando como partida a una chica anónima de Cuenca y atravesando otros blogs de Sevilla, Barcelona o Mallorca, he llegado a la página de un tal Javi con el que coincidí en el concierto de Fangoria en Viladecans. En ese momento y sin conocerlo demasiado me cayó fatal, ( eso no es algo nuevo para muchos de mis amigos, que saben las malas caras que pongo ante los desconocidos y lo bien que me caen horas más tarde). No es que lo haya tratado mucho más desde entonces, pero este chico me está cayendo mucho mejor a través de su blog que en persona. Gracias a él, por ejemplo, he podido confirmar que otra pareja de conocidos que venía con nosotros al concierto, ya no lo son, es decir, que han roto.
Cotilleos al margen, con este sistema me entero de muchas otras cosas, critico, comparto opiniones etc.